DOCUMENTACIÓN

  

              

 

UNAS RELACIONES MUY SERIAS

Con esta carta empieza la historia de nuestra familia. Es la carta que dirige una madre, Dolores Lugo-Viña, Viuda de Serra, a Don Carlos H. Hamilton, pidiendo para Wenceslao, su primogénito la mano de su hija Selina Hamilton:

Afortunadamente, estas cartas se han guardado en Santa Cruz de Tenerife durante un siglo, en el ordenado archivo de la Casa Hamilton, con el nombre Hamilton / Comercial, dentro del legajo "cartas recibidas - Private Ch. H. H, 1903 - 1907". Allí están los originales recibidos y con ellas las copias de las cartas que las contestaron y con ellas toma forma primero su noviazgo, después su matrimonio y luego, nuestra misma existencia.

 

Madrid, 19 de Mayo de 1904
Sr. D. Carlos H. Hamilton
Muy señor mio:

 

              
              

Por indicación de mi hijo mayor Wenceslao, quien ha tenido el gusto de conocer y tratar a Vd. y a su estimable familia durante su permanencia en esa Capital, molesto su atención a fin de hacerle presente el deseo de mi ya citado hijo, de sostener relaciones autorizadas con su hija Selina para contraer matrimonio con ella en fecha no lejana, pero determinada con entera libertad por Vds. sus padres

Mi gustoso consentimiento queda de manifiesto desde el momento en que escribo estas líneas, pero, a mas de las excelentes referencias hasta mi llegadas, hubiérame bastado la constante insistencia de mi hijo sobre este particular para creer en la gran posibilidad de que tal enlace le haga feliz.

Desearía que mi hijo estuviera en condiciones de poder ofrecer a la que haya de ser su compañera de toda la vida un porvenir brillante como no hubiera otro, mas en situación de supernumerario sin sueldo hasta su probable ascenso a capitán dentro de dos años, sus medios de vida se reducen a un sueldo de 60 duros por su trabajo en una sociedad particular, ayudado por alguna otra insignificancia y por unos 4.500 duros que poseo en dinero.

Nada es esto pero sí la realidad.

Esperando se digne Vd. manifestar su parecer, así como el de su Señora y el de su hija Selina, sobre la aceptación del compromiso y demás proyectos anteriormente expresados, le saluda y se ofrece.

S.s.s.q.s.m.b. (1)
Dolores Lugo-Viña
viuda de Serra
S/c Fernando VI, 13 y 15, pral.

1. su segura servidora que su mano besa


              
              

Con la misma fecha Wenceslao escribe una breve carta dirigida a Carlos H. Hamilton:

Martes 19 de Mayo de 1904
Sr. D. Carlos H. Hamilton

 

Muy señor mio y respetable amigo: Después de saludarle atentamente, le manifiesto que mi principal objeto es comunicarle la carta de mi Madre que acompaña a esta, en la que se hace referencia a mi deseo de contraer matrimonio con su muy apreciada hija Selina.

Encargo a Ud. mis recuerdos cariñosos a su muy agradable familia y Ud. sabe le aprecia

Su atmo. y s.s. que s.m.b.
Wenceslao Serra


              
              

Tenemos las copias de las respuestas a las cartas de madre e hijo, respectivamente, que se habían recibido el día 28 de mayo, según consta en ellas el sello "Received 28 MAY 1904". La primera de las respuestas, la más larga de las dos copias, en la que evidentemente faltan algunas palabras, está dirigida a Mamá Lola y reza así:

(copia)
S.C. Tenerife
5 de junio 1904
Sra. Dª Dolores Lugo-Viña de Serra

Muy respetable Señora mía: He recibido su atenta carta del 19 de Mayo en que me pide autorización para las relaciones de su hijo Wenceslao con mi hija Selina, con el propósito de contraer matrimonio en breve plazo. Habiendo tenido el gusto de tratar a su hijo durante su permanencia aquí y conociendo que reune muy buenas cualidades no tenemos inconveniente en aceptar su proposición. Si hay natural (?) y aunque el egoismo justificado de los padres sufra con estas separaciones, sobre todo como cuando ahora son dos hijas en pocos meses - pero no hay más remedio. Nuestra verdadera (?) en este caso es la separación no ya de nuestro lado sino del país y no correspondería a la sinceriodad con que Vd me habla, si le ocultase que tanto para su madre como para mí, es un terrible sacrificio que solo nos decidimos a hacer por la felicidad de nuestra amada Selina; solo nos cabe el consuelo de que encontrará entre Vdes. otra cariñosa familia.

Con el mayor gusto Señora ofrezco a Vd. mis respetos y la más distinguida consideración.
su affmo s.s.q.s.f.b.

C.H.H.

 


              
              

La otra copia, la de la carta dirigida a Wenceslao, es muy breve y dice lo siguiente:

(copia)
Santa Cruz
Tenerife
5 de Junio 1904

Mi querido amigo:
Tengo el gusto de acusar recibo de su carta del 19 de Mayo e incluyo la contestación oficial que su Señora madre se digna pedirme en su carte de la misma fecha y por ella verá que queremos hacerle dueño de nuestra querida hija Selina. Abrigamos la convicción profunda que Vd. la merece y la aprecia en lo que vale.

La familia toda, incluso Juan, le envía sus recuerdos cariñosos y sabe Vd. que le aprecia su affmo. amigo.

C.H.H.

Sr. Don Wenceslao Serra
Madrid

Supongo que Selina le ha escrito que va conmigo a Inglaterra en Octubre.

 


              
              

Wenceslao escribe con abundante texto a su futuro suegro para comunicarle el agradecimiento y la satisfacción habidos ante su aprobación a las relaciones con Selina:

Madrid 15 de junio de 1904
(RECEIVED 21 JUN 1904)

Mi muy respetable amigo:
apenas recibida su altamente atenta y carñosa carta fecha 5 de del corrte. y enterado de la muy satisfactoria dirigida por Ud. a mi madre, me apresuro a contestarle temeroso de que mis palabras no exterioricen mi satisfacción en su justo valor al ver la excesiva bondad de Ud. creyéndome digno de su hija Selina. Soy el primero en comprender el sacrificio que representa la separación de una hija querida, y lamento de todo corazón que nuestro matrimonio sea causa indirecta de ello, pero me creo en el caso de manifestar que, en mi criterio, es y será siempre, acrecentar en su hija por todos los medios a mi alcance, el cariño y respeto de que tan merecedores son sus padres. No ha de ser ella sola la que ausentes les recuerde a cada instante y desee verse entre Uds. con la frecuencia que las circunstancias permitan: en tales recuerdos y semejantes deseos, me harán tomar parte mi agradecimiento y la "algo más que amistad" que siempre me inspiraron Uds. Por otra parte tengo la certeza de que Selina encontrará en mi madre y hermanos otra segunda familia.

Recibirá Ud. por este correo un obsequio que le ruego ofrezca a Selina, en mi nombre y en conmemoración de nuestra autorizada promesa de matrimonio.
Tenía noticias de su viaje a Inglaterra con Selina y celebraré sea llevado a cabo con toda felicidad,

Espero haga Ud. extensiva esta carta a su Señora, a quien no me dirijo directamente por la premura del tiempo, siendo mi idea efectuarlo a la mayor brevedad posible.

Deseando un completo restablecimiento para Charles, con mil recuerdos para todos y no sin manifestar lo que me alegraría verme tratado por Ud. con la confianza de un padre a un hijo, se despide cariñosamente

Wenceslao Serra

Mi madre tendrá el gusto de contestar a Ud. en el próximo correo.

 

Sr. Don Carlos H. Hamilton


 

              
              

Y, finalmente, esta es la posterior contestación de Mamá Lola a la de aprobación de relaciones que había enviado Carlos H Hamilton y que cierra con tanta corrección y elegancia el capítulo primero de nuestra familia:

Madrid 19 de junio de 1904
(RECEIVED 27 JUN 1904)

Sr. D. Carlos H. Hamilton

Muy señor mío y de mi mayor consideración: en mio poder su atenta fecha cinco del corriente, no puedo menos de felicitarme por el feliz éxito de las gestiones de mi hijo, encaminadas a contraer matrimonio con su estimable hija Selina agradeciendo y ratificando la creencia de Vd. que tanto me honra de que ella ha de encontrar en mí y en los mios el aprecio y cariño merecidos, y manifestándole nuestro gran deseo de conocerla y tratarla.Curiosidad natural, aumentada por la noticia de sus muchas virtudes.

Dispuesta al mejor acuerdo en todo y en especial a lo relativo al asunto especial de estas líneas, reitera sus ofrecimientos como S.S.Q.L.M.B.

Dolores Lugo Viña

 

              

 

              

 

 

En el magnífico "Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y sus posesiones de Ultramar", editado por Pascual Madoz en 1848, en el tomo correspondiente a Madrid, página 293, dentro del epígrafe dedicado a "Educación primaria" aparece el siguiente artículo sobre el "Colegio Sérra", de este colegio era director Francisco Serra Guía, padre de Fracisco Serra y Basas, y bisabuelo de Wenceslao Serra.
El artículo está transcrito literalmente, en el español de la época:

Colegio de Sérra: (calle del Duque de Alba, núm. 4). Este establecimiento que con el nombre de Colegio de Humanidades  fundó D. Francisco Sérra en la calle de Barrionuevo en octubre de 1834, se trasladó en junio de 1837 al magnífico palacio que ocupa hoy en la plazuela del Duque de Alba , cuyo edificio reune cuantas dependencias son necesarias al objeto que está destinado. Este colegio declarado de primera clase por real órden 1845, é incorporado á la Universidad literaria, se ha hecho notable por sus brillantes exámenes públicos, que anualmente celebra; cuenta con los útiles indispensables para todas las clases de instrucción primaria, latinidad, con una abundante coleccion de modelos para el dibujo natural, de perspectiva,.paisages, adorno, delineación y topografía, y para las asignaturas de Filosofía, o sea para los 5 años que comprende la 2a. enseñanza, reune una coleccion completa de mapas, globos y demás instrumentos necesarios para el estudio de la geografía; para la geometría práctica posee los instrumentos necesarios; un escogido gabinete de física y química con las máquinas propias para esta clase de instrucción, así como una escelente colección de productos minerales para el conocimiento de las ciencias e Historia Natural. La aritmética mercantil, giro, teneduría de libros en partida doble, la arqueología, idiomas francés, inglés, é italiano, la música , el baile, la equitación, la esgrima y la gimnasia son otros tantos ramos de adorno de la educacion que se da en este colegio á los alumnos internos y medios pensionistas. Nada, en fin, tiene que envidiar este colegio á los nacionales ni estrangeros, y sus profesores contribuyen á la par que su dueño y director el Sr. Sérra, á conservar el buen nombre que han sabido adquirirle. La parte religiosa está desempeñada por un capellán director espiritual celebra diariamente el santo sacrificio de la misa en el oratorio del colegio, para lo cual, así como para que en él confesasen y comulgasen los colegiales obtuvo el Sr. Sérra el oportuno breve  de Su Santidad. Hay ademas en este establecimiento 2 enfermerías; una para las enfermedades de poca consideración y otra para el caso de ser contagiosas, ambas con buena ventilacion especialmente la segunda separada del resto del colegio. Es considerable el número de colegiales y medio-pensionistas, que pertenecientes á familias de la Península y Ultramar, recibe la educación en esta casa, de la cual todos los años salen muchos para ingresar en los colegios ó escuelas especiales de artillería, ingenieros y minas, y no es corto el número de los alumnos de este colegio que hoy ocupan un puesto elevado en la Jurisprudencia, la Diplomacia, Medicina, Farmacia y el Comercio.

              
              

Palacio de la duquesa de Sueca
Su historia

En esta gran manzana se encuentran tres edificios de importancia, en primer lugar (en rojo) la antigua catedral de San Isidro; en verde el Instituto San Isidro y, finalmente, el palacio de la duquesa de Sueca (en amarillo) antigua sede del Colegio de Humanidades de Serra.

Situada a espaldas de la antigua Catedral de San Isidro y los Reales Estudios de San Isidro (actual Instituto San Isidro) esta gran casona de 7.200 metros cuadrados ha pasado por muchas manos y por ello fue conocida como "La Casa de las Temporalidades".

En el siglo XVIII fue escuela para los hijos de los criados de Carlos III. Después, en 1791, el arquitecto Antonio de Abajo transforma el edificio en suntuoso palacio y a comienzos del siglo XIX pasó a manos de la duquesa de Sueca, con cuyo nombre se quedó el edificio. Ese título de Duque de Sueca le había sido concedido a Manuel Godoy, primer ministro y favorito de Carlos IV, que recibió los de marqués después duque de la Alcudia, principe de la Paz, barón de Mascalbó, principe di Bassano, conde de Evoramonte, signore de Soto en Roma, señor de la Albufera, generalísimo de los Reales Ejércitos y Almirante mayor de España y de las Indias, jefe superior del Real Cuerpo de Artillería e Ingenieros y capitán general de los Reales Ejércitos, aunque todo su esplendor se apaga con el levantamiento popular del 2 de mayo de 1808.

Con la llegada de los liberales se pusó totalmente punto final a la etapa palaciega y el edificio pasó en 1837 a ser el prestigioso Colegio de Humanidades de Francisco Serra, Después, ya a finales de siglo se convirtió en cuartel de la Guardia Civil.

Lo que no dice el artículo del Diccionario de Pascual Madoz es que la educación que allí se daba era la de la llamada escuela persa , es decir las tres doctrinas fundamentales: equitación, esgrima y decir siempre la verdad. No está nada mal tal idea, aunque hoy no sería nada atractiva la insistencia en la sinceridad como fundamento de vida y obra.

Más tarde, en un estado de casi total anbandono pasó a ser un bloque de viviendas en estado de semi-ruina. Finalmente, en 1999 el Ayuntamiento lo adquirió para convertirlo en un centro administrativo, pero ya en 2008 se empezó a hablar de su transformación en una gran edificación (conservando fachada y patios) con 107 viviendas provisionales para jóvenes.

  

              

  

              

 

ESCENAS AFRICANAS

Seguramente el joven teniente de Infantería Wenceslao Serra no tenía la más mínima idea de cual iba a ser su futuro a la vuelta de unos pocos años y, mientras tanto disfrutaba en Melilla de la compañía de otros oficiales, entre los que se dedicaban estos versos que están escritos

 

 

en el dorso del tarjetón sobre el cual se montó la foto
Son unas graciosas estrofas y manuscritas, como no podía ser de otro modo, que aqui transcribo tal y como se escribía a finales de 1897, con la ortografía de la época:

  

 

De los siete que se ven
De estos versos al revés,
Verás, si te fijas bién
Lector, que son tontos tres
Y los otros tres también

El que en el suelo tendido
Está en mangas dfe camisa,
Es tonto reconocido,
Pues por nada se ha reído
Y ahí está muerto de risa.

El que con un tenedor
Quiere en el pollo pinchar
Y no mira, pincha en vano,
Lo que quiere es enseñar
Los anillos de su mano.

El que en pié, quiere sacar
Tan militar su figura,
Con tan forzada postura,
Le sobra de militar
Y le falta de cordura.

   

 

Y el que obscuro y retirado
Está en el suelo sentado
Con un cordon por el cuello,
Aunque pretende de bello
Es un tonto rematado.

Y apoyados en el codo
Los dos que con ellos vés,
Son cada uno á su modo
Uno tonto y otro bobo
Y las dos cosas después.

Aunque con tal tontería
Suelen tener cosas buenas
Pues gastan mucha alegría
Y los quieren á porfía
Las mujeres y á docenas.

Y en Melilla nunca habrá
Quien les ponga el pié delante
Ninguno les fallará,
Por que gastan mal talante
Y hacen una atrocidaddd.

Melilla 16 Septiembre 1897

  

              
    
    

La fotografía de Wenceslao y sus felices compañeros debe haber sido tomada en el interior del fuerte de Cabrerizas Altas, junto al torreón, a la derecha de su fachada principal, una fortificación entonces de reciente construcción y ya con historia, que servía para cerrar eficazmente el cinturón más exterior de la ciudad.

Según la información histórica que he recogido de las páginas de Cultura de la Defensa he aquí la HISTORIA DE LA FORTIFICACIóN:

El fuerte de Cabrerizas Altas forma junto con el fortín de Reina Regente la línea exterior de defensa de Melilla. Empezó a construirse para dotar de seguridad al campo exterior de la ciudad según los límites establecidos en varios acuerdos con Marruecos.

Su actuación militar más relevante tuvo lugar durante la campaña conocida como Guerra Chica, en el año 1893. Mientras se desarrollaban los trabajos de construcción del fuerte Sidi Guariach, los marroquíes hostilizaban a los soldados que realizaban las obras. El hostigamiento culminó en un ataque llevado a cabo por unos mil cabileños el 2 de octubre del citado año. Las fuerzas españolas, 137 hombres, tuvieron que retirarse a Fuerte Camellos. El 27 de octubre, unos nueve mil cabileños atacaron el Fuerte Camellos y el de Cabrerizas Altas. El Gobernador de Melilla, general García Margallo, instaló su puesto de mando en Cabrerizas Altas. A las nueve de la mañana del día siguiente, salió un convoy de Melilla. Su objetivo era reforzar la línea exterior y proporcionar suministros. Al acercarse a Cabrerizas, fue duramente atacado.

Para apoyar la entrada del convoy en el fuerte, el general Margallo dio orden de colocar ante la entrada del fuerte dos piezas de artillería. La explanada estaba enfilada por el fuego enemigo desde la Cañada de la Muerte: los disparos acabaron con la vida del general y varios de sus hombres.

Las piezas quedaron abandonadas en la entrada del fuerte, en tierra de nadie. Cuando los cabileños se disponían a apoderarse de ellas, el capitán de la guarnición y algunos artilleros salieron del fuerte, libraron combate con ellos y recuperaron las piezas. El 5 de marzo del año siguiente se firmó el acuerdo que puso fin a esta Guerra Chica. Cabrerizas Altas tomó parte también en las campañas de 1909 y 1921 (fin del Protectorado de Marruecos y desastre de Annual, respectivamente), como el fortín de Reina Regente.

 


    
    

 

Dieciseis años después, Wenceslao manda una postal tranquilizadora a su madre:

  

    
    

  

    
    

Sra. Da. Dolores Lugo-Viña
Almagro, 32 pral. dcha.
Madrid

  

Tetuán " Campamento Puerta Tánger "

23 Agto. 1913

Mi queridísima mamá:
El de la izquierda de esta postal soy yo. Aunque un poco en sombra.
Ya sé por Selina que todos por ahí estáis bien y que los chicos han ganado mucho.
Pasado mañana vamos a Lauzien para estar incomunicados allí 10 días, de modo que no os extrañe estar sin noticias mías.

Yo sigo muy bien y trabajan-
do mucho.

Muchos recuerdos a todos
besos a los chicos y tú recibe un
abrazo de tu hijo.

Wenceslao

  

    
    

Y es que en ese año, Selina escribía en la página del día 11 de junio de su agenda la siguiente frase escueta: 1913 Toma de Lauzien (Tetuán)

Y a las dos semanas, el 24 de junio, añadía esta otra nota de su puño y letra:

Por lo tanto, era el comandante Serra quien mandaba la tropa que iba a estar en Lauzien, una pequeña población del interior de Tetuán sobre la meseta que domina y protege a la ciudad, por lo que era de vital importancia mantener la meseta de Lauzien bajo control militar.

En mayo de 1913, la situación en la región montañosa de Yebala llegó a ser muy peligrosa, con incidentes por toda la zona occidental del Protectorado. Los Regulares, las tropas nativas, la más condecoradas de toda la campaña de Marruecos acudieron en auxilio de las tropas allí establecidas.

Oficial de Cazadores de infanteria en uniforme de campaña en Africa, 1913.
Ilustración de Salas

Tras ayudar a la columna dirigida por el general Primo de Rivera, siguieron otras acciones heroicas, entre las que destacó la conocida como "Las Bayonetas de Lauzien", una impresionante acción de guerra en la que los Regulares acudieron a salvar a los Cazadores, consiguiendo un buen número de bajas del enemigo en su acometida a la bayoneta en las peladas lomas de Lauzien. Después de esta hazaña, el cuchillo bayoneta se incorporó al emblema de los de Regulares, junto con la media luna creciente, símbolo del contingente indígena.

En esta postal de época vemos las cocinas y cantinas en la parte más alta y el campamento de Lauzien a la derecha.

Esta otra postal nos da la vista inversa, desde el campamento de Lauzien, en la parte inferior, se pueden ver las cantinas y cocinas en la parte más alta del terreno, a la derecha de la fotografía.

Hasta Lauzien llegó el ferrocarril militar de vía estrecha (600 mm) que venía desde Río Martín en la costa, pasando por las inmediaciones de Tetuán, en un primer tramo de 11 kilómetros y siguiendo desde allí junto al puente de Mogote, otros 19 kilómetros más hasta llegar a Lauzien.

Hubo que esperar hasta ese día 11 de junio de 1913, durante las operaciones dirigidas por el general Alfau Mendoza, primer Alto Comisario del Protectorado, para poder tomar Lauzien y construir la línea militar que daba servicio a la zona de Tetuán, centro del territorio encomendado a España el 27 de noviembre de 1912 con la firma del Tratado De Madrid entre España y Francia.

Naturalmente, este ferrocarril era un elemento esencial para abastecer al Ejército en su penetración hacia el interior del Protectorado, en unos años de enfrentamientos militares con las cabilas en armas del Raisuni y después de Abd-el-Krim, hasta llegar al desembarco en Alhucemas y terminar con la pacificación del territorio y una posterior prosperidad nunca conocida por los rifeños.

    
    

 

Pero veamos cómo se describe oficialmente ese difícil tiempo de servicio en Marruecos, y lo hacemos conservando el texto tal y como está redactado en la Hoja de Servicios:

  

MINISTERIO DE LA GUERRA
HOJA MATRIZ DE SERVICIOS
DEL
Comandante de Infantería
D. Wenceslao Serra y Lugo-Viña

1913. De guarnición en Madrid hasta el 5 de mayo que según R.D. de 8 de abril (D.O. nº 79) y orden telegráfica de 4 del citado mayo, salió con su batallón en tren especial para Algeciras, donde llegó el 7, embarcando seguidamente en el vapor "Canalejas" con rumbo a Ceuta, llegando el mismo día y quedando de guarnición. Por R.O.C. de 19 de mayo (B.O. 109) fue declarado apto para el ascenso, cuando por antigüedad le corresponda. El 27 y cumpliendo lo dispuesto por el E.S. Comandante general en orden de la Plaza de 21 del mismo, salió con su batallón para el Rincón del Medik donde vivaqueó y pernoctó. Al siguiente día continuó la marcha para Tetuán, acampando en Dar Murcia siguiendo desempeñando servicios de campaña y el 7 de junio se trasladó al campamento general de la Puerta de Tánger. El 11formando parte de la columna mandada por el Coronel Don José García Moreno, ocupó la posición de Dar Laucien, sosteniendo rudo combate con el enemigo y empezando seguidamente los trabajos de fortificación durante los días siguientes, siendo continuamente hostilizado por el enemigo. El 19 efectuó un reconocimiento en la Kabila de Wad Ras en cuyo combate resultó herido el Comandante Jefe accidental del Batallón, Don José Jiménez Coronado, haciéndose cargo este Capitán del mando del mismo. El 21 y protegiendo el convoy de heridos y enfermos, regresó al campamento de Tetuán.

Campamento de Ben Carrik, o Ben Karrich

El 22 cesó en el cargo de Jefe accidental del batallón haciéndole entrega del mando del mismo al Teniente Coronel Don Julio Echagüe. El 24 formando parte de la columna mandada por el Coronel Señor García Moreno asistió a la toma del Poblado de Ben Carrik y el 25 protegiendo el convoy de heridos regresó al acampamiento de Tetuán, continuando los trabajos de construcción y protección de las carreteras. El 8 de julio protegió desde la "Calera" y sus lomas avanzadas la retirada de las fuerzas que efectuaron el reconocimiento y destrucción del poblado de Samsa, conteniendo con sus fuegos el ataque del enemigo citándosele como distinguido en este hecho según orden del Cuerpo del 18. El día 10 se trasladó a Laucien, el 11 batió al enemigo en las proximidades de la posición, mereciendo por su distinción, citarse en la orden del Cuerpo del 15 y el 12 constituyendo la vanguardia del convoy de heridos, regresó al Campamento general. El 22 marchó con su batallón al campamento de la desembocadura del Río Martín, regresando el 25 a Tetuán. El 4 de agosto prestó el servicio de protección de convoy en el camino de Laucien, librándose un combate con el enemigo y regresando al campamento de Tetuán.

El Ricón de Medik, al borde del Mediterráneo.

El 6 marchó al campamento de Rincón de Medik, regresando el 9 al de Tetuán. El 26 escoltando un convoy marchó a la posición de Laucien, donde quedó hasta el 6 de setiembre que regresó a Tetuán, protegiendo con su compañía la carretera sosteniendo ligero tiroteo con los moros. El 12 protegió el convoy desde las lomas de Arapiles a Laucien, sosteniendo fuego con el enemigo. Por R.O. de 7 de octubre (B.O. 224) se le concede la cruz militar de 1ª clase del Mérito Militar con distintivo rojo pensionada por su brillante comportamiento en las operaciones realizadas del 11 al 24 de julio en Tetuán. Según oficio 149 del Señor Teniente Coronel 1er. Jefe de esta Batallón de 14 de octubre ha sido propuesto este Capitán por juicio de votación para el empleo inmediato por méritos contraídos del 11 al 24 de junio ya mencionados. El 5 de noviembre marchó con su compañía a la posición de Izarduy. El 8 fue hostilizado por el enemigo y el 17 regresó a Tetuán. El 17 de diciembre asistió al combate sostenido en las proximidades de Laucien para construir el Blockaus X y el 19 batió al enemigo en los montes de BENI Arran, regresando al campamento general donde de servicios ordinarios de campaña, finó al año.

1914. De servicios de campaña en el campamento general hasta el 12 de enero que formando parte de la columna mandada por el E.S. General de brigada don Miguel Primo de Rivera, asistió a la protección de la construcción de un Blockaus en las inmediaciones del "Reducto Izarduy " cubriendo el batallón los dos montes del frente de dicho Reducto, sosteniendo fuego con el enemigo durante todo el día, continuando en el campamento general hasta el 16 que marchó con el batallón destacado a la posición de Laucien donde permaneció hasta fin de mes que por R.O. fecha 15 de enero (D.O. 12) fue ascendido al empleo de Comandante como mejora de recompensa, en vez de la que le fue ofrecida por R.O. de 7 de octubre anterior (D.O. 224) por los méritos que contrajo en las operaciones y combates realizados en el territorio de Tetuán, hasta el 24 de junio último. Por otra R.O. fecha 28 (Diario Oficial 19) es destinado al Regimiento de Infantería Cuenca nº 27, causando baja en este batallón en fin de dicho mes y sin incorporarse fue destinado por R.O. de 21 febrero (D.O. 43) a situación de excedencia en la 1ª región. Por R.O. de 17 de abril (D.O. 85) y por los méritos que contrajo en las operaciones realizadas y servicios prestados en el Territorio de Tetuán, desde el 25 de junio a fin de diciembre de 1913, se le concede cruz de 1ª clase del Mérito Militar con distintivo rojo. Por otra R.O. manuscrita de 18 de agosto se le concede en el referidito empleo de Comandante la antigüedad de 24 de junio de 1913 como mejora de recompensa que le fue otorgada por R.O. de 15 enero próximo pasado (D.O. nº 12) y en dicha situación finó el año.

1915. En la anterior situación. Por R.O. comunicada el 15 de enero se le concede en el empleo de Comandante la Cruz de 2ª clase del Mérito Militar con distintivo rojo, en sustitución de la de 1ª clase de la misma orden y distintivo que en el de Capitán le fue otorgada por R.O. de 17 de abril del año ppdo. (D.O. nº 85). Por R.O. de 20 de enero (D.O. 16) fue destinado de plantilla al Ministerio de la Guerra al que oportunamente se incorporó. Por disposición de 1º de mayo fue designado para que sin perjuicio de su cargo de Jefe del 2º Negociado de la Subsecretaría de este Ministerio desempeñe el de Bibliotecario del mismo.

 


    
    

 

Un año después, en diciembre de 1914, cuando la Gran Guerra ya lleva cuatro meses arrasando los campos de Europa con una violencia hasta entonces desconocida, Wenceslao manda una pacífica y preciosa postal de Tanger a todo color a su hijo Carlos, que acaba de cumplir 9 años. Me imagino lo que iba presumiría el niño ante sus amigos luciendo la postal africana.

En esta preciosa y exótica postal se puede leer el siguiente mensaje:

Tánger 17-12-1914

Querido Carlitos: esta tarde he ido a caballo con tía Eugenia que iba en burro. Esto es muy bonito. Mañana nos vamos a Gibraltar, dormiremos allí y el 19 iremos a Algeciras. El 20 iremos a Granada. Tengo muchas cosas que contaros. Recuerdos a tus hermanos y un beso a Mamá.

Wenceslao


Una foto para la ocasión

Seguramente, esta fotografía de Tia Eugenia, que estaba en su mejor album de fotos, en la que ella aparece posando de elegante novia bereber en un balcón marroquí, debe de haber sido hecha en esos días.

Unos días inolvidables, supongo, en un emocionante viaje en el que no sólo cruzaba a sus anchas las sorprendentes poblaciones del protectorado español de Marruecos, sino que hasta entraban de visita a la zona internacional de Tanger, cruzando de nuevo a la inversa el estrecho y hasta pasando por la ciudad de Gibraltar, a la sombra del imponente peñón, para después cruzar a Algeciras, de vuelta a la patria y seguir todavía el viaje, recalando en la hermosa Granada, último baluarte de los musulmanes en España.

Y todo ello de la mano del indudablemente estupendo guía que tenía que ser su hermano Wenceslao y que le haría un excelente resumen de todo lo mucho que el conocía de historia y de la gente del Rif con la que llevaba años conviviendo.

  

  

    

  

              

 

CADENAS DEL AIRE

  

Este libro es una soberbia crónica de los días terribles del fracaso de la II República, en la que se cuenta la difícil vida diaria, el valor de las ideas y la entrega de los aviadores en la guerra civil. Narra con naturalidad la aventura personal de José Luis Jiménez-Arenas, estudiante de medicina cuando comienza la guerra y después piloto de combate en casi todos los frentes que termina volando en la cadena, la forma más dura de enfrentarse al enemigo y una de las más eficaces para conseguir acelerar el final de la contienda con el desmoronamiento de las últimas defensas en tierra, eso sí, con un coste terrible de vidas entre el personal de vuelo.

Aquí comentaré la edición de 1973 de Editorial San Martín, precisamente en aquellas páginas en las que se hace referencia a Rafael Serra Hamilton, Alférez de Aviación y piloto en La Cadena.

              
              

 

En la página 257 podemos leer:

Son las diez de la noche; sentados en tumbonas, al aire libre, formamos corro. Hay luna llena; dentro de cuatro días será San Juan. La débil luz que sale a través de las ventanas del barracón de madera nos ilumina.

No corre aire, en mangas de camisa gozamos del frescor y la placidez nocturna. Estamos todos los pilotos del Grupo: el Corto (Comandante José Muñoz Jiménez), Cuadra Diéguez, Talo (Santiago González Guzmán ) González del Valle, el Maño (José Ma. Ripollés) Ozores, Serra, Domecq, el Colima (Luis Medrano de Pedro) el Turuta (José Ma. Llobet) y yo. Talo toca el gramófono de cuerda al lado de Serra.

Termina el disco, coge la armónica - e interpreta "Borinquen", la bella rumba cubana; después, "Chaparrita".

El Turuta me cuenta la historia de la Cadena del Corto:

-Se constituyó el tres de diciembre del año pasado. Tenía el nombre de l-G-2, ó sea, Primer Grupo de Caza Heinkel, cuyo indicativo es 2, pues al principio se usó únicamente como caza, hasta que se comprobó que con este tipo de avión era imposible mantener la lucha aérea contra Chatos y Ratas. El trece de abril del pasado año, cuando aún actuaba como caza, se efectuó la primera operación táctica de "cadena" registrada en la historia de la Aviación Mundial, ametrallando la ermita de Santa Quiteria, entre Tardienta y Almudévar. Lo original del ataque fue que cada avión protegió al anterior cerrando el jefe el círculo al defender la cola del último punto de la formación. Pero la verdadera innovación consistió en que se realizó formando un círculo vertical, con el fin ofensivo de ametrallar las trincheras enemigas, pues esta maniobra táctica cuando se realiza en plano horizontal y con fines defensivos se denomina, como ya sabes, "hacer la pescadilla" y es conocida desde la Primera Guerra Mundial.

Fue tan eficaz este tipo de ametrallamiento que la División Carlos Marx abandonó la posición con más de 400 muertos. Este espectacular resultado se vio favorecido por el hecho de ser las trincheras rectas, por la proximidad del ataque y por lo certero de la puntería, como lo prueba el que el legionario abanderado que iba en cabeza de las tropas asaltantes coronó la cima a pie y a pecho descubierto, precedido por las ráfagas de los aviones dirigidas a escasos metros por delante.

Al encargarse el Corto de los Heinkel 51, con la misión de actuar como "cadena", formó el Grupo inicial junto con el capitán Cuadra, que provenía de Caballería, pero que había actuado como observador en los Breguets 19 y en los Pavos antes de que se hiciera cargo de los mismos el Cucufate (Comandante Cipriano Rodríguez). El Grupo se formó con dos cadenas, la primera al mando del Corto y la segunda de Cuadra. Como pilotos estábamos Diéguez, González del Valle, Palacios, el Barón (Ruy Ozores), Carreras, el Maña, Talo, Domecq, Amoedo, Encinas, Gervos, Giménez Guerra, Pelines (Aragón Muñoz), Serra Hamilton y yo.

El 27 de diciembre efectuamos el primer servicio de guerra desde el Aeródromo de Calamocha, a raíz de las operaciones de Teruel.

Luis Palacios cayó en Villar del Río, tirándose en paracaídas, con tan mala fortuna de descender en terreno enemigo, donde le fusilaron. Se le concedió la Medalla Militar individual.

Amoedo murió en las operaciones del Alfambra. Talo interviene: -Quiero que sepas que lloré por Amoedo como un chiquillo. Llorando salí al servicio siguiente, viendo el avión destruido. El Turuta y Pelines fueron a recogerlo, los trozos vinieron en una manta. En aquel servicio no tuve miedo, la enorme pena y rabia me llenaban los ojos de lágrimas. Era amigo mío desde pequeño, juntos hicimos el curso de pilotos.

El Corto, que ha seguido atento las palabras de Talo, comenta: -Un disparo de tierra hizo explotar las bombas debajo del asiento, el avión se partió en dos trozos, por eso hay que tiradas todas a la primera pasada.

Diciendo esto se levanta y marcha a descansar, despidiéndose: -Buenas noches a todos.

Nos incorporamos correspondiendo a su saludo.

Sentados de nuevo, el Turuta prosigue:

Carreras y Giménez murieron de accidente. El Barón se lanzó en paracaídas un día que le incendia­ron el avión, lamiéndole las llamas las piernas. Encinas también murió derribado sobre un carrascal de Teruel, por cierto que mientras ardía el avión se acer­có para intentar salvarle un oficial provisional de Infan­tería, que resultó carbonizado de tal manera que, cuan­do enviamos sus restos a los familiares, no sabíamos re­conocer cuál era cada uno de ellos.

Pelines (Julián Aragón Muñoz) cayó en el Guadalopé.

En realidad tú vienes a cubrir bajas, al igual que el Colima, que se incorporó después de la batalla de Te­rue!.

Crespi también ha sido destinado al Grupo, pero el Chili no le deja incorporarse.

- A propósito de derribos, dime cuándo consideráis que un avión ha sido derribado - inquiero.

-Solamente cuando aterriza fuera del campo, moti­vado por avería causada por el fuego enemigo. Por cier­to que Cuadra hace tres días fue derribado en la Muela de Sarrión por un impacto desde tierra en la hélice, to­mando tierra en un bosque de pinos en Puente Libros, el aparato quedó hecho puré, con la suerte inmensa de salir ileso de dentro del puro. Es la tercera vez que le derri­ban en mes y medio. En una de éstas tomó tierra en un campo de trigo, teniéndose que desmontar el avión y traerlo en un camión, para no estropear la cosecha.

 


 

En la página 269, se lee lo que sigue:

En resumen, lo que hacemos es obligarles a pasar miedo. Miedo ante la muerte. Y no hay nada más contagioso cuando es excesivo, tal como he dicho antes. Por eso cuando éste surge ante nuestros picados, ocasionamos el temor colectivo o pánico, haciendo que los miliciano s huyan atemorizados, momento que nosotros aprovechamos para perseguirles con nuestras trazadoras, ya que ante una amenaza directa, grave y desorbitada se reacciona de dos maneras: Con sobresalto y tempestad de movimientos, en este caso corriendo, o permaneciendo inmóvil, haciéndose el muerto, para pasar desapercibido.

Este es el momento psicológico que nuestra infantería utiliza para ocupar sus posiciones.

Antes de nuestra actuación se realiza la preparación artillera y el bombardeo con aviones pesados y ligeros, lo que predispone al enemigo a desmoralizarse con facilidad al atacarles nosotros de una forma directa y desde un ángulo desde el cual no se sienten protegidos.

La efectividad, si tenemos en cuenta el número de bajas que causamos, no es muy grande, por eso creo que nuestra actuación es más bien desmoralizadora creando el pánico y bajo este punto de vista es enorme. Mas teniendo en cuenta que estamos veinte minutos sobre el objetivo, tiempo suficientemente largo como para que piensen que aquello no se va a acabar nunca.

Si no fuese por este temor que les hacemos sentir nos derribarían muchas veces, pues en nuestro ataque estamos llenos de puntos muertos, ya que únicamente cubrimos con nuestro fuego el que marca la dirección de nuestro avión.

 


 

Comenta el autor en la página 270:

Me siento encallecido, no sé si llamarlo veteranía o inconsciencia de juventud, pero esta guerra, aunque terrible, tiene más momentos de alegría que lo contrario. He llegado a separar totalmente los instantes de acción de los que Vivo en camaradería, buena prueba de ello es que tácitamente no hablamos de los Muertos pasados, algo así como si fuera gafe el mencionarlo.

Cuando cae un compañero, se siente enormemente. ¡Cómo no! Se vela su cadáver, se le acompaña por un par de nosotros hasta entregado a su familia, se le llora, pero al día siguiente aquello no se vuelve a recordar. El gramófono de Talo vuelve a sonar, con más fuerza que antes. Nuestras bromas continúan exactamente igual.

 


 

En la página 271 se describe perfectamente el carácter tranquilo y campechano de Rafael:

Viene a visitamos el general Monasterio. Está de oficial de servicio Serra. Hemos estado visitando el frente por tierra, cuando legamos lo encontramos en animada charla con el general.

El Corto, preocupado, le pregunta:

-¿ Qué ha hecho cuando ha llegado el general? Esperando saber si le ha rendido los honores correspondientes:

-Le he invitado a una copa - contesta muy ufano.

 


 

En la página 277 se describe la muerte de Rafael:

El 13 se inicia por Sarrión la cuarta fase de la ofensiva de Levante, la más dura.

Actuamos apoyando las tropas de Varela y Solchaga. En el segundo servicio son alcanzados tres aviones, uno de ellos el del Turuta, le rompen el mando de alabeo, teniendo que pilotar con la palanca totalmente hacia un lado. Rafael Serra Hamilton, de madre inglesa, cae muerto sobre nuestras líneas. Va detrás de Talo, al salir del picado virando le vemos desplomarse envuelto en llamas. Desconocemos en aquel momento quién pueda ser.

Muñoz y Cuadra tampoco saben quién es. A medida vamos dando las novedades, nos miran angustiados. Al presentarse el último, el capitán dice con mezcla de pena y rabia: -Ha sido Serra.

Es la primera y única vez que he visto al Corto con lágrimas en los ojos. Recogido su cadáver, se coloca en una caja de pino en la entrada del pabellón. Durante la noche lo velamos todos por turno.

Talo, llorando, nos enseña una foto de fotomatón, que le regaló, dedicada 1úgubremente: "A mi amigo Talo, del R. 1. P. Rafael Serra." Esta foto se la enseñó un día a Jorge Muntadas, "Muntaditas", quien le dedicó otra exactamente igual. También Jorge morirá al terminar la guerra.

Se trasladan sus restos.

Al día siguiente efectuamos dos servicios al mismo lugar donde cayó Serra.

 

              

  

              

 

Y no se puede dejar de mencionar un libro excelente, el estudio histórico de Agustín Guimerá Ravina:
"La Casa Hamilton"
Una empresa británica en Canarias
1837-1987"
(ISBN:84-404-5194-1989)

Es un texto muy interesante porque en él se reconstruye tanto toda la información sobre esos 150 años del traslado de una familia de un país a otro muy distinto, sin renunciar a su forma de vida, y al siglo y medio de la actividad económica de una empresa que ha de adaptando a los muchos cambios y transformaciones del período más agitado de la historia contemporánea.

              
               Este es un interesante y completo artículo de María Carrillo Santana sobre la Familia Hamilton, publicado el 24 de Mayo de 2003 en el suplemento "La Prensa" del diario "El Día" de Santa Cruz de Tenerife.

LA GRAN FAMILIA HAMILTON

Por María Carrillo Santana

A lo largo de los tiempos, han sido muchos los miembros de la familia Hamilton que han dejado su impronta en la Historia. Figuras como Alexander Hamilton, primer tesorero de los Estados Unidos; William y Emma Hamilton, personajes vinculados a la vida del almirante Nelson; George Hamilton Gordon primer ministro británico; o Lord James Hamilton, que fuera esposo de María Estuardo, son nombres que hemos escuchado, tenido en nuestra mente o en nuestros labios en más de una ocasión y alguna vez nos planteamos la duda de si tuvieron algún tipo de relación o parentesco con los integrantes de la familia Hamilton establecida en Canarias desde hace casi dos siglos. En estas líneas intentaremos esbozar ese nexo, que existe y puede documentarse, con estos protagonistas de los anales de la Historia y las Islas.

La familia Hamilton, de origen británico, se asentó en las Islas Canarias desde el año 1819. El primero de este apellido que llegó a las Islas fue Lewis Gellie Hamilton, quien vino para trabajar en la empresa Gilbert Stuart Bruce, de la que con el tiempo se convertiría en socio. En 1837 fundó la Compañía Bruce, Hamilton and Co, que fue disuelta en 1878 , siete años más tarde, en 1885, se crea bajo la denominación de Hamilton y Compañía -nombre que ostenta esta compañía aún en la actualidad-.

Lewis Gellie Hamilton había nacido en 1798 en la localidad escocesa de Greenock, en el condado de Renfrew, en el seno de la familia conformada por John Hamilton e Isabella Gellie cuyo padre era el Capitán Lewis Gellie, siendo a su vez nieto de Archibald Hamilton y de Agnes Hyndman. Esta rama era descendiente directa, por esta línea paterna, del monarca James II de Escocia, que sería el noveno bisabuelo de Lewis, al haberse desposado la hija de aquel rey, la princesa Mary Stewart, con James Hamilton, primer Lord Hamilton de Cadzow. Concretamente, Lewis Gellie Hamilton es octavo nieto de James, primer Conde de Arran, uno de los hijos del citado Lord.

James Hamilton nació hacia 1415, contrayendo primeras nupcias en 1440 con Euphemia Graham, condesa de Strathearn, y, al enviudar, casó en 1474 con la Princesa Mary Stewart, hija del rey James II de Escocia y de Marie D’Egmont. Este matrimonio tuvo como fruto tres hijos: David, James y Elizabeth Hamilton.

Una vez trazado, a grosso modo, el tronco original del que procede la familia Hamilton isleña, pasemos a estudiar a las diferentes figuras que hemos mencionado.

Sir William Hamilton, diplomático británico,arqueólogo y vulcanólogo nacido en Escocia en 1730, cuya colección de antigüedades adquirida en la exploración que llevó a cabo en Pompeya fue vendida al Museo Británico en 1772, fue embajador en Nápoles y autor, entre 1774 y 1800, de varias obras de las que destacan Antiquités étrusques, greques et romaines  (1766–67) y Mount Vesuvius  (1772). Sir William, cuarto hijo de Lord Archibald Hamilton, se desposó, en 1758, con Catherine Barlow -hija del parlamentario Inglés Hugh Barlow -, y tras enviudar, contrajo matrimonio con Emily Lyon en 1791, la cual posteriormente pasaría a los anales históricos por su relación amorosa con Lord Horacio Nelson. A estos detalles biográficos debemos añadir que Sir William era descendiente directo de Elizabeth Hamilton, ya mencionada con anterioridad, lo que convertiría a Lord Hamilton en el séptimo bisabuelo de Sir William Hamilton y octavo bisabuelo de Lewis Gellie Hamilton. De esta manera, Sir William aparece como tío octavo de Lewis Gellie, y su esposa, Emma Hamilton, sería tía octava política del propio Lewis, circunstancia que no deja de ser bastante sorprendente conociendo la vinculación del que fuera su amante con la historia de la isla de Tenerife.


Retrato de Emma Lyon

Emma Hamilton, de soltera Emily Lyon, nació en 1765 en Nesse, Great Neston, Condado de Cheshire, Inglaterra, hija de Henry Lyon, herrero de profesión y Mary Kidd, pasó una adolescencia y primera madurez bajo el fingido nombre de Emma Hart, inmersa en una vida desmedida y lujuriosa en Londres. Conocida amante del aristócrata Charles Greville, éste la envió a Nápoles con su tío Sir William Hamilton, donde Emma se convirtió en bailarina, que deleitaba a los invitados de Sir William con danzas inspiradas en elementos clásicos, Goethe que en una ocasión fue espectador de sus danzas escribió "Su puesta en escena no se parece a nada de lo que he visto anteriormente, Ella expresa una variedad de maravillosas transformaciones, una pose tras otra sin descanso". En 1791 se casó con Sir William, pasando a ser Lady Emma Hamilton y ganando el favor de la Reina María Carolina de Nápoles. La relación íntima con el almirante Nelson comenzó en 1798, y tras el regreso de ambos a Inglaterra, en Enero de 1801 tuvo como fruto una hija, de nombre Horacia. Sir William cae enfermo y en 1803 fallece dejándole una pensión anual de 800 libras. En 1805 el almirante Nelson fallece en la batalla de Trafalgar. En un codicilo de su testamento, Nelson pide al gobierno Británico que la provea en su ausencia, lo que no ocurrió, y a la muerte del héroe inglés Emma se declara en bancarrota y es arrestada en 1813 por deudas. Al año siguiente pasó a refugiarse a la localidad de Calais, en Francia, donde al poco tiempo acabaría sus días.

Otro miembro y figura importante dentro de la familia Hamilton a nivel global aparece en la Historia de los Estados Unidos. Alexander Hamilton, que vio la luz en 1755 en la Isla caribeña de Nevis, era uno de los hijos del matrimonio de James Hamilton y Rachela Lavien. Aún joven, con apenas 23 años, se desposó con Elizabeth Schuyler, con la que procrearía 8 hijos. Ascendió a capitán de artillería y, más tarde, entre 1777 y 1781, ocupó el cargo de secretario del General George Washington, quien al ser elegido primer presidente de los Estados Unidos le designó primer secretario del Tesoro de los Estados Unidos. Alexander pasó a los anales de la Historia norteamericana igualmente por haber sido el fundador del Banco Nacional. Su muerte, acontecida el 2 de Julio de 1804 en el transcurso de un duelo con el vicepresidente Aaron Burr, en Weehawken (Nueva Jersey), -motivado al haber leído Burr unas declaraciones de Hamilton en su contra publicadas en un periódico- Burr en lugar de ser recordado por su carrera política pasó a la Historia como el asesino de Alexander Hamilton.

La relación de parentesco entre Lewis Gellie Hamilton y Alexander Hamilton es algo más lejana que la anteriormente reseñada, aunque ambos tienen como antepasado común a Gilbert de Hamilton, primer Hamilton que se conoce hasta la fecha -nacido antes de 1272- y a Isabel FitzRandolph, su esposa, quienes tuvieron por hijo a Walter Fitztgilbert. Lo único que se sabe con certeza de este personaje es que falleció en 1345, habiendo contraído matrimonio con Mary Gordon, fruto del cual nacieron 3 hijos: John Hamilton de Ballencrief, David Fitzwalter de Hamilton y Walter Hamilton. El segundo de ellos, David, es el antepasado directo de Lewis Gellie Hamilton y Sir William Hamilton, siendo conocido por haber sido nombrado Barón de Cadzow por el rey de Escocia David II, haber participado en la batalla de Halidon Hill, en Durham -donde fue hecho prisionero en 1346-y por haber sido uno de los líderes que ayudaron a que fuera coronado Robert III. El tercer hijo de Gilbert de Hamilton, Walter, es el antepasado de Alexander Hamilton, figura señera en los comienzos de la historia estadounidense como hemos comprobado.

Con todo este cúmulo de datos podemos afirmar que Lewis Gellie Hamilton, fundador de la rama Hamilton canaria, y el tesorero Alexander Hamilton fueron primos en decimocuarto grado y Sir William Hamilton y Emma Hamilton fueron tíos en decimotercer grado de Alexander Hamilton.

Otro Importante político de la gran Familia Hamilton fue George Hamilton Gordon, Primer ministro británico entre 1852 y 1855 y fundador de la Athenian Society. George Hamilton Gordon nació en Edimburgo el 28 de Enero de 1784 era el hijo mayor de George Gordon ,Lord Haddo, y Charlotte Baird y decimosegundo nieto de James I Stewart Rey de Escocia y Joan Beaufort abuelos de Mary Stewart esposa de Lord Hamilton mencionada anteriormente, casó con la hija de John James Hamilton, Marqués de Abercorn y de Catherine Copley, Catherine Elizabeth Hamilton , novena nieta de James Hamilton, Primer Earl of Arran,. George Hamilton Gordon era gran amigo de la Reina Victoria, la cual en todos sus viajes a Escocia se alojaba en Haddo House la residencia de la Familia Hamilton Gordon en Escocia.


Haddo House

Lewis Gellie Hamilton es tío en décimo grado del primer ministro británico George Hamilton Gordon y tío octavo de Catherine Elizabeth Hamilton, su esposa. Sir William Hamilton es tío undécimo de George Hamilton Gordon y tío octavo de su esposa. El político americano Alexander Hamilton es tío en decimosexto grado del primer ministro británico George Hamilton Gordon y decimoquinto de su esposa Catherine Elizabeth Hamilton

En resumen, podemos concluir que cuatro personalidades cumbre en nuestra Historia fueron parientes y, aunque parezca sorprendente, quizás ellos mismos jamás lo supieron. La genealogía es una ciencia que hace que las familias se reúnan, encuentren sus vínculos históricos y sus raíces, y que personas que nunca pensamos que podían tener ninguna filiación finalmente sean parientes lejanos.

¿Sabían que en las Islas Canarias hay un gran número de familias descendientes de Alfonso X El Sabio, de quien a su vez provienen casi todas las casas reales? Esta circunstancia colocaría a un número elevado de familias canarias en relación de parentesco con la Realeza europea, aunque este hecho es sólo uno más entre las muchas filiaciones entre personajes importantes e históricos y familias enlazadas en nuestras islas, ya que, en definitiva, la humanidad no deja de ser una gran familia.